Entradas

Mostrando entradas de diciembre, 2011

Querido Santa:

Imagen
Cartita de Santa Claus Siempre he tenido pláticas con amigas, acerca de lo que deseamos, queremos e imaginamos, y Dios sabe las peticiones que hemos hecho, cuando se trata de amores, la lista es interminable. Quiero un hombre con la vida resuelta, pero que me deje contribuir un poco a su realización para no sentirme tan fuera de su vida. Que me ame con locura, y que sus ojos sean solo para mí, que no sea celoso, y me de espacio para continuar con mi vida, que sea hogareño pero no aburrido para que podamos salir… ---Amiga, amiga… que sea guapo, agrégale “ai”, ya ves la otra vez que pedimos, estaba muy pinche tu ex mana el Felipe ----Si, ¡ya se! pero era tan bueno. ----- Amiga, amiga…ponle ahí también que no esté tan jodido, ya basta mana, ¡ya! -----Si, si… que tenga dinero, pero que no sea tan engreído y que lo comparta conmigo, porque ya ves lo que le paso a ésta, tenía uno muy pudiente pero lo compartía con la amante. Nuestra carta de Santa Closs es interminable e insuficiente para

Mira Lisa, podemos ver justo el cuadro cuando se le rompe el corazón.

Imagen
Y entonces Mira lisa, podemos ver justo el cuadro cuando se le rompe el corazón… ¡crack---crack—puck puck—y caen al suelo los pedazos!--- Y como dijera Ahumada: ¿quién recoge esos pedacitos de corazones rotos que vamos dejando al caminar?… que molestos son, cuando los traemos en los zapatos y tenemos que sacudirnos un poco para poder avanzar. La primera vez que se rompe el corazón. La primera vez que sientes esa ansiedad en el pecho… ese instante en donde el aire se escapa de tus pulmones, tus ojos se desorbitan, lloras, lloras y lloras, hasta sentir que te desmayas de dolor, sientes la garganta seca…tragas y vuelves a llorar, y te doblas en la cama, y abres los ojos y tratas de recuperar el aliento y viene a tu mente esa persona y tratas de incoporarte… pero vuelves a doblarte, literalmente te doblas y te agarras el pecho con tu mano abierta, como si ésta pudiera ayudarte a sosegar el sentimiento… y viene el habla… y lo único que puedes articular es: ¿Por qué, por qué y por qué? Y cua