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La mejor pregunta para ligar.

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Estaba leyendo un artículo de Yahoo que decía cuál era la mejor FRASE para ligar. Y obvio me llamo la atención. Yo que en estos tiempos ando precisando de esa información y no por que quiera andar ligando gente (cuando oigo ligando me viene a la mente un doctor hablando de anticonceptivos permanentes) bueno, sino por información neta antropólogica y esos estudios sociales que me encantan. Y entonces antes de leer el artículo me puse a pensar en eso…en preguntarles a los que conozco cual sería la mejor pregunta para ligar. Repito ¿CUAL ES LA MEJOR PREGUNTA PARA LIGAR? De eso trataba el artículo. Y no falta el “te he visto por aquí” “te pareces a una prima” u “¡Oye Liza! ¿Qué tal!?. Ay no perdón te confundí”. O algunos que dicen “depende la ocasión, primero las atrapo con mis chistes con ser el sarcástico de la fiesta el que llama la atención y ya después que tengo la atención de todos, la hago sentir especial dirigiéndome hacia ella”. Eso me lo dijo una vez el papá de mi hija.

La señora (cuento)

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"Si vas a ser infiel hazlo, pero se leal, no vayas a quejarte de lo gorda o frígida que es tu mujer o que tienes problemas porque está loca. Se hombre y se valiente, no quieras refugiarte en los brazos de otra causando lástima". Isis Zavala. La señora se vio en el espejo y supo que tenía que perdonar, él le regaló 30 años de matrimonio, dos hijos, un ingeniero y un doctor, tres nietos y un perro labrador. Pero con esos treinta  vinieron quince de su ausencia y la presencia de ella.  Nunca le reclamó, sólo le prometió que jamás volvería a saber de Catalina "la güera". Su güera, la señora Montes Castaño. Ellos coincidían, si claro que coincidían  en navidades, cumpleaños y festivales de los nietos. Pero él cada vez que buscaba sus ojos, efectivamente por más que lo intentara no podía verla. La señora también se llegó a topar con la empleada, ¿si les dije que había sido su empleada doméstica? Pero la señora Catalina nunca desvió la mirada, en cambio la muchacha  siempr

Ensayando a Kundera

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He conocido a muchos mo nstruos y muchas caras del amor  y  lo que en este instante detona  es precisamente la acción de uno de ellos.  La  esperanza que todos tenemos:  creer en el amor . Y  que alguien sin ningún derecho te lo arrebate de golpe y te haga caer en la penumbra, en un portal donde ya no exista esa palabra.  No es que no tenga nombre. Al contrario, tiene tantos.  Y no descansa ese ayer que te recuerda que tan pesado puede ser tener fe y que tan liviano al mismo tiempo dejar de creer en todo. “Nunca seremos capaces de establecer con seguridad en qué medida nuestras relaciones con los demás son producto de nuestros sentimientos, de nuestro amor, de nuestro desamor, bondad o maldad, y hasta  qué  punto son el resultado de la relación de fuerzas existente entre ellos y nosotros” siempre me he cuestionado lo mismo, palabras más palabras menos. Y si, es de Milán  Kundera , creo que ni es necesario decir en  que  libro pero los ortodoxos me llamarán  indisciplinada. La Insoporta

Fue en ese bar...

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Y fue en ese bar. Somos los juglares  Miramonte  y nos encanta versar, es momento de contar esta historia que los va a enamorar. No podemos meter títulos nobiliarios así porque si, digamos que eran dos aldeanos que se conocieron una noche en la taberna del Tío Pitt. Llegaron sin mayor pretensión que la de encontrar  un buen beso robado en algún rincón de ese ancho bar. Dijimos digamos,  pero la realidad aunque no lo parezca es que  él  era un  principe  de la mesa del billar y ella una linda princesa de altamar. Las apuestas no se hicieron esperar  y ella con sus amigas doncellas esa noche abandonaron la mar  y decidieron ir a buscar un poco de suerte en aquella cantina en ese oscuro lugar. De lúgubre parecía tener todo, dije parecía...porque la realidad es que era la taberna más cotizada  del momento y de todo el reinado  MonteAlban . Las cortesanas le dijeron a la princesa Mireya que  ahi  solo podía encontrar diversión y jamás  al verdadero amor. Dijeron. Ella con sus ojos grandes n