BURKA PARA TI
Las mujeres sabemos perfectamente como llamar la atención del sexo masculino cuando queremos hacerlo. No importa, gorda, flaca, alta, chaparra. Como sea, pero sabemos enseñar cuando queremos hacerlo.
Y bueno, decides usar una minifalda o algún escote revelador, y esto también trae consigo piropos que ya estamos acostumbradas teniendo conciencia plena del motivo.
¿A qué va todo esto? Bueno, en mi terruño hermoso, en un día de norte (los que sepan que es el norte) Sabrán ustedes, como ese viento huracanado te arrastra y llena de arena en 5 minutos que sales de tu casa, pero no es frío. ¡No puedes abrigarte porque no tienes frío!.
Bueno, eso pasa. Te pica la arena del mar, el viento corre como alma que lleva el diablo y tú escupes tierrita de la boca. Yo, cita con el psicólogo. Norte. Las palmeras borrachas, parecían que tenían ataque epiléptico. Y dije: ¡Ni madres! ¡Yo no me empanizo como huachinango!.
Agarre mi pashmina hindú que compre en el World Marquet y me envolví al mismísimo estilo de Lawrence de Arabia. Y salí estoica a la calle.
Lo que nunca me pasó ni vestida a la Jessica Rabbit, pasó en ésta ocasión. Aquellos, los del otro sexo, se me quedaban viendo, hubo piropos, (no es broma) hubo connato de choque, dos de ellos se me aceraron con el pretexto: ¿cuál es la calle ¨Pino Suárez”? Me empina usted ¿qué?
Osea, ¿Cómo? ¡Iba yo toda tapada!
Pensé, y me revisé. Pantalón de mezclilla, zapato bajo, blusa larga, ¿traigo brasierre? Si, si traigo. Viene alguna werota chichona atrás de mi, yo volteaba y nada.
Llegué con el Dr. Freud y le dije o estoy en mi día fértil como he leído en tantas revistas o los hombres de esta zona tienen problemas sexuales.
Y cejita levantada, me dice ¿cómo?
Y yo cejita agachada, le dije. Pues es que… bla bla bla bla…
Dr. ---- Isis, ¿por qué crees que está lleno los table dance?
Isis ----¿Depravados Sexuales?
---No, ¿por qué crees que la luz a medias? esa luz neón, ellas con pelucas, con antifaces algunas, con tanto atuendo personificando a la enfermera, a la sirvienta francesa, a la colegiala.
Dije: ---Ay no ¿otra vez congalera?
-----Isis, es el misterio.
A los hombres les gusta el misterio. NO todo dado. Les gusta tener que descubrir poco a poco a la mujer.
NO todo en total exposición, No todos los secretos en seguida que la conocen. Y ustedes piensan que son honestas y que tienen que contar.
No, es ese misterio de irlas descubriendo poco, enamorandonos de lo que no vemos, de lo que no conocemos, eso permite echar a volar la imaginación. Saber que sólo nosotros podemos desvestir a esa mujer, en secretos, en sentimientos, en todo.
El hombre requiere una carnada misteriosa pues el recurso inconsciente es: "la curiosidad mato al gato" y eso te vuelve mas interesante.
Aún casadas, aún con pareja, el recurso de perderte un rato, de no tenerte a la vista, de buscarte con la mirada para saber donde estás y con quien estás. Estar presente, pero a veces con ese halo de misterio que cautiva.
El descubrirte, para ellos es cautivador y excitante. No saber que es lo que se pueden esperar contigo. No saber a que atenerse cuando piensan que ya lo saben todo.
Breve puente musical de Epifanía. Y salí.
Y queridos y queridas, después de esa plática de vez en vez… me envuelvo en una burka.
Jeje la parte de la chichona que venia detrás es muy buena.
ResponderEliminarExcelente artículo, me gusta mucho tu redacción.
Saludos.